
En Río de Janeiro, la velada del UFC dejó una de las actuaciones más contundentes del peleador Gijones hasta la fecha. Joel Álvarez (23 – 3) triunfó con claridad sobre Vicente Luque (23 – 12 – 1) por decisión unánime en lo que supone su estreno en la categoría de peso wélter. 
Camino a la pelea: contexto y preparación
Joel aceptó el combate con poco tiempo de anticipación, tras la lesión de Santiago Ponzinibbio, que abrió la oportunidad para que el español saltara al octágono. 
El cambio de categoría responde a que bajar hasta 70 kg (peso ligero) se le hacía particularmente exigente; el corte de peso le afectaba demasiado y limitaba su rendimiento. 
Durante el pesaje superó la báscula sin mayores problemas, marcando 77,1 kg, lo que habla de una adaptación física adecuada al nuevo peso. 
Desarrollo del combate
Desde los primeros instantes, Álvarez impuso el ritmo. Su jab, combinaciones precisas y control del centro del octágono le dieron ventaja sobre Luque, que intentaba responder con volados y ataques explosivos, pero sin conseguir conectar de forma decisiva. 
Un momento tenso llegó cuando un crochet de derecha impactó en el ojo de Luque, lo que provocó que el árbitro hiciera una pausa para revisar la acción y permitir que el brasileño se recuperara. Luque reclamó que el golpe había sido con dedo, pero las repeticiones apuntan a que fue legal. 
En el segundo asalto, Joel intensificó su ofensiva con rodillazos y golpes precisos, y cuando Luque buscó llevar la pelea al suelo, Álvarez reaccionó con dominio: tomó la espalda, controló la posición y descargó golpes. Muchos en el público consideraron que el árbitro debió detener antes la pelea ante el evidente dominio. 
El tercer round transcurrió con un Joel más cauteloso pero manteniendo la ventaja. Luque obtuvo un derribo, pero el español neutralizó el avance, recuperó posición dominante y rondó incluso opciones de sumisión desde la espalda. 
Al sonar la campana final, las tarjetas reflejaron el dominio íntegro de Álvarez: 30-26 / 30-26 / 30-26. Fue la primera vez en su carrera que ganó una pelea por decisión, pues hasta ahora prácticamente todas sus victorias venían por finalización. 
Qué significa esta victoria
•Con esta actuación, Joel rompe la barrera del peso ligero con éxito y muestra que puede ser un contendiente serio en la categoría de 170 libras (wélter).
•Entrar directamente al top 15 del ranking en esta división es una posibilidad real, si su desempeño sigue igual de sólido. 
•Más allá del resultado, lo que impresiona es su capacidad de adaptación: aceptar la pelea con poco aviso, cambiar de peso, y aún así dominar a un rival local en su territorio.
•También reafirma una faceta clave de su estilo: no renuncia a terminar sus combates, pero ahora demuestra que, cuando debe, sabe pelear de forma inteligente y controlada hasta el final.
Declaraciones destacadas
Álvarez comentó tras el combate:
“Estamos contentos. No es la victoria que esperábamos, porque siempre buscamos la finalización… Noté que mi mano entró e iba cerrada. No supuso nada, no cambió la pelea.” 
En definitiva, esta noche Joel “El Fenómeno” escribió un nuevo capítulo de su carrera: su dominio absoluto, versatilidad y mentalidad competitiva pintan su futuro con luces ambiciosas en la división wélter.