

La 38.ª edición de la Semana Negra de Gijón arranca mañana, 5 de julio, en los terrenos de los antiguos astilleros de Naval Gijón, y lo hará con todo a punto salvo por una notable ausencia: la emblemática noria de 54 metros no formará parte este año del recinto ferial. Su propietario ha decidido no participar en eventos en el norte del país esta temporada. Pese a ello, la feria contará con cerca de medio centenar de atracciones para todas las edades, además de un completo programa literario y cultural.
La cita, que se prolongará hasta el 13 de julio, volverá a combinar literatura, ocio y espectáculos. Cuatro grandes carpas albergarán presentaciones de libros, encuentros con autores y conferencias, como las que ofrecerán el escritor irlandés John Banville y la dramaturga argentina Claudia Piñeiro, encargados de inaugurar el certamen.
A falta de la noria, la gran novedad en el apartado lúdico será “The Limit”, una imponente atracción con una columna central de la que parten sillas voladoras giratorias, capaces de alcanzar alturas superiores a los 50 metros y con capacidad para unas 20 personas. Se sumará a clásicos como los coches de choque o el “Ratón Vacilón”, junto a propuestas más atrevidas como “Extazy”, gestionada por el feriante Saúl Olivar, que confía en que estos días de feria “sean buenos en lo económico, como suele ocurrir cada año”.
En total, unas 25 familias de feriantes se han inscrito para esta edición, y se encuentran en la recta final de los trabajos de instalación.
Más allá del programa literario y las atracciones, esta edición de la Semana Negra rendirá tributo a figuras clave de la cultura. Entre ellas, al poeta Ángel González, con motivo del centenario de su nacimiento, mediante una lectura colectiva y otros actos conmemorativos. También se reservará un espacio para recordar al escritor y traductor Mariano Antolín Rato, referente del “underground” literario español, fallecido en enero de 2025.